La administración central de Paraguay cerró noviembre de 2025 con un déficit fiscal equivalente al 2,0% del Producto Interno Bruto, en un contexto marcado por la desaceleración de la inversión pública. Según datos oficiales, los ingresos acumulados ascendieron a 49,2 billones de guaraníes, lo que representa un crecimiento interanual de 5,5%. Este aumento estuvo impulsado principalmente por la recaudación tributaria, que alcanzó 38,6 billones, con una suba de 9,3% respecto al mismo período del año anterior.
Las contribuciones sumaron 3,1 billones de guaraníes y las donaciones totalizaron 1,6 billones, con incrementos interanuales de 4,4% y 3,0%, respectivamente. En cuanto al gasto, el total ejecutado llegó a 48,6 billones de guaraníes, registrando un aumento de 3,2%. El mayor componente correspondió a las remuneraciones del sector público, que alcanzaron 20,2 billones, seguidas por las prestaciones sociales con 9,6 billones, que crecieron 15,2%.
Los pagos de intereses totalizaron 6,8 billones, con un aumento de 6,0%, mientras que las donaciones alcanzaron 5,6 billones. En contraste, el uso de bienes y servicios se redujo 22,6%, acumulando 4,9 billones. La inversión en activos no financieros cayó 3,9% interanual y sumó 5,3 billones, reflejando un ajuste por el lado de la inversión pública. Como resultado, el déficit acumulado llegó a 4,7 billones de guaraníes, consolidando el resultado fiscal negativo del período.























































































































































