Amanda Seyfried atraviesa una etapa de profunda renovación personal y profesional al acercarse a los 40 años. En una entrevista con CBS Sunday Morning, la actriz reflexionó sobre los cambios que transformaron su vida en la última década, desde su mudanza al campo hasta la maternidad y la gestión de la ansiedad. Según afirmó, esta fase representa una combinación de madurez, autonomía y bienestar emocional que antes no había logrado alcanzar.
El cambio del ajetreo urbano por un entorno rural fue decisivo. Seyfried explicó que vivir rodeada de naturaleza le otorgó el espacio y la seguridad que siempre buscó. Tras muchos años en la ciudad, reconoció que el ritmo acelerado la desgastaba y que necesitaba un lugar donde sentirse en control. Hoy, afirma que ese movimiento le permitió reconectarse consigo misma y asumir decisiones con mayor claridad.
La actriz también habló sobre el significado de cumplir 40 años dentro de la industria: las preocupaciones ya no giran únicamente en torno a la apariencia, sino sobre procesos profundos como la perimenopausia, la menopausia y la percepción emocional del cuerpo. Destacó que, gracias a una conversación más honesta entre mujeres, puede vivir esta etapa con empoderamiento y libertad. “Me siento más joven ahora que hace 10 años”, reconoció.
La maternidad marcó otro punto de inflexión. Aunque tras convertirse en madre recibió papeles más encasillados, asumió esos desafíos con una mirada distinta, convencida de que su experiencia le permite interpretarlos con mayor autenticidad. Para Seyfried, esta nueva etapa es una oportunidad para reconstruirse desde la fortaleza, la calma y el autoconocimiento.













































































































































































































































































































































































